Para recordar
Un paseo por su entorno natural
(foto: Ximo Segura Ferrer)
Sin lugar a dudas, una de las visitas más bellas que podrás realizar en el término municipal del Forcall será su entorno natural. Si decides pasar unos días en esta bella población, no debes marcharte sin antes haber visitado el Paraje Natural de la Mola de la Vila, con una fauna y flora particular, y las numerosas fuentes repartidas a lo largo de su territorio.
La Mola de la Vila es un paraje natural del Forcall que cuenta con una superficie de casi 130 hectáreas y alcanzando una altitud media de 920 metros. El paisaje en el que se encuentra ubicado está caracterizado por las muelas, unas elevaciones de considerable altitud con su parte superior plana y cuyos bordes forman abruptos acantilados, todo un espectáculo para la vista. Gracias a su magnífica situación sobre la confluencia de los ríos Bergantes, Caldes y Cantavieja se consiguen unas increíbles vistas panorámicas de la comarca de Els Ports y, en especial, del valle del Bergantes.
(foto: Ximo Segura Ferrer)
Paseando por sus bosques tendrás contacto directo con la naturaleza y la oportunidad de disfrutar de su flora y fauna característica de la zona. En la vegetación del territorio destacan los bosques de carrasca acompañados de especies como el boj, el roble o el arce, entre muchas otras. Por lo que respecta a la fauna, podemos encontrar una gran diversidad de ésta, siendo la cabra montés la especie por excelencia, además de numerosos buitres Leonados anidando en la zona y el águila perdicera. También hay una gran cantidad de especies de reptiles como el sapo, la rana, la culebra bastarda y el lagarto ocelado.
Una vez visitado el Paraje Natural de la Mola de la Vila, te recomendamos que te des una vuelta por el término municipal para visitar las numerosas fuentes que hay esparcidas por el territorio. El hecho de que existan numerosos cauces de agua hace posible que se construyan numerosas fuentes entre bellos paisajes. A lo largo del curso del río Caldes tendrás la oportunidad de visitar numerosas fuentes como la de Santa Ana, que desde 1649 se dice que tiene propiedades minero-medicinales; les Fontetes; la Felipeta; de l’Olm, que cuenta con una zona recreativa y merendero; y la Panera. Por su parte, en el río Cantavieja encontrarás las fuentes de la Vila y los lavaderos, la Escuriola y la Picolicha. En último lugar, a lo largo del cauce del río Bergantes se hallan situadas las fuentes del Roure y de la Teula. Así pues, en cualquiera de estas fuentes podrás coger un poco de agua para el camino mientras disfrutas de un agradable paseo y si tienes suerte, toparte con alguna de las especies autóctonas de la zona como la cabra montés o el buitre. Toda una experiencia para recordar.